¿Qué es el Implante de Naltrexona?
El implante de Naltrexona es una forma de tratamiento farmacológico para la dependencia de opiáceos y alcohol. Se aplica en pacientes que han sido desintoxicados de estas sustancias. La naltrexona no causa dependencia física, lo que permite su administración repetida sin riesgo de adicción.
¿Cómo Funciona el Implante de Naltrexona?
El implante libera una dosis continua de naltrexona que bloquea los receptores de opiáceos en el organismo. Si el paciente consume drogas durante el tratamiento, no experimentará los efectos típicos de estas sustancias, reduciendo así la satisfacción y la posibilidad de recaída.
Procedimiento de Colocación del Implante de Naltrexona
La colocación se realiza mediante una pequeña incisión en la piel, generalmente en la zona glútea, y se coloca de forma subcutánea:
El implante de naltrexona en CDMX es una de las formas de tratamiento Farmacológico para la dependencia de los opiáceos.
La terapia con naltrexona en CDMX se aplica en pacientes que han sido sometidos a la desintoxicación de opiáceos. La interrupción del consumo de naltrexona no causa síntomas de abstención, ya que no es posible desarrollar dependencia física de la naltrexona. En otras palabras, la naltrexona puede ser administrada cualquier número de veces.
La idea de este método consiste en inducir en el organismo del paciente una substancia que interfiere con los efectos de los narcóticos y hacen posible el consumo de los opiáceos. El implante libera continuamente una cierta dosis de naltrexona, la cual bloquea los receptores de opiáceos en el organismo.
Si el adicto consume drogas con el implante, la misma no producirá ningún efecto y el adicto no sentirá ninguna satisfacción. Cuando las drogas se consume con Naltrexona, pueden producirse reacciones muy desagradables y peligrosas. Por ello es que la terapia con naltrexona aísla de cierto modo al adicto de los dos opiáceos.
Los implantes contienen altas concentraciones de naltrexona que se liberan gradualmente en el organismo. De tal manera, el adicto no tiene que recordar que debe tomar la tableta diaria de naltrexona.
Lo mismo es también un alivio para los miembros de la familia, ya que no tienen que preocuparse y pensar si el adicto ha tragado la tableta. Se les aconseja a los pacientes usar la protección de los implantes por un mínimo de 12 meses después de ser dados de alta.
Las reimplantaciones son posibles un número ilimitado de veces. La duración del tratamiento con naltrexona es determinada individualmente y puede incluso durar años, siempre y cuando exista la necesidad de prevenir la reincidencia.
La implantación de naltrexona en México DF se coloca vía subcutánea haciendo una pequeña incisión en la piel, en la zona glútea.
Se realiza en una sola sesión y solo con anestesia local en la región a implantar.
Después de la implantación se puede continuar con las actividades diarias.
El implante de naltrexona en CDMX es segura, pero hay realizar seguimiento y compromiso para poder evitar cualquier efecto secundario y ayudarlo con sus problemas. El Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos (FDA) apróbo su uso en 1985 com tratamiento para problemas con el alcohol y adicciones a otras drogas.
Para llevar a cabo el tratamiento de implante de naltrexona en CDMX, se requiere que el paciente se realice análisis de sangre.
Hay que tomar en cuenta que el uso de implantes está contraindicado en casos de hepatitis y cirrosis hepática.
La condición básica para el uso del implante de naltrexona es que el paciente haya estado limpio los últimos 7 a 10 días y no haber consumido opiáceos.
Se recomienda que antes de asistir a la aplicación del implante de naltrexona en México DF, el paciente se somete a un examen de orina para detectar la presencia de drogas, y es ampliamente recomendado que dicho examen lo hagan con la presencia de un familiar.
Los efectos adversos de un implante de naltrexona en CDMX son sumamente raros.
Con el fin de prevenir las reacciones alérgicas al implante (enrojecimiento, hinchazón y picazón), se prescriben antibióticos, antihistamínicos y corticoides, los cuales deben ser tomados bajo la indicación del doctor.
Hay que tener en cuenta que existe el riesgo de sobredosis, si el adicto con implante de naltrexona consume drogas. Al no sentir el “flash” con la dosis habitual de drogas, el adicto aumenta la dosis y eso puede llevar a una sobredosis.
Cuando el cuerpo NO está limpio de opiáceos, el uso de la naltrexona en CDMX provoca unas reacciones muy violentas, incluyendo dolor, diarrea, vómitos, estornudos, ojos llorosos, etc. Así como algunas consecuencias imprevistas, tales como obstrucción de las vías respiratorias, inflamación del cerebro, coma, shock e incluso la muerte.
Debe comprometerse a pasar varios meses sin los efectos de la heroína u otros tipos de opiáceos. La Naltrexona ayudará a disminuir sus antojos para facilitar este compromiso.
Hepatitis aguda o insuficiencia hepática, y su uso en pacientes con hepatopatía activa, debe considerarse cuidadosamente con base en sus efectos hepatotóxicos. Se debe advertir a los pacientes del riesgo de lesión hepática.